Akira siempre fue un chico muy tierno y lindo, tal vez no era el más fuerte pero era la persona más buena que haya visto. Aunque son buenas características, debo decir que una vez que se convirtió en un Devilman, Akira obtuvo un lado salvaje que al verlo, mi kokoro hizo doki doki. De un chico lindo, Akira se convirtió inmediatamente en un chico totalmente salvaje, salvajemente sexy. Se volvió más alto, su piel se bronceo un poco y se volvió muy atractivo, tanto que cada que lo veía no podía evitar un suspiro. Su personalidad fue más arriesgada, ya no era tímido y comenzó a sobresalir con una actitud badass, tan cool que el primer día como Devilman en el colegio se volvió popular entre chicos y chicas.

Su nueva naturaleza es salvaje, más demonio, por ejemplo, ahora tiene más fuerza y energía y tiene que comer en grandes cantidades, (aunque eso en su casa lo ven como algo normal porque está creciendo) su personalidad se vuelve un poco arrogante, sobre todo cuando se trata de encarar bravucones, (cosa que ya antes hacia pero sin hacer uso de la violencia); por otra parte Akira ahora trae el libido al cien, esta naturaleza salvaje comienza a ser más intensa, sobre todo cuando Miki está cerca, por lo que tienen que huir y satisfacer ese deseo.

Las nuevas habilidades que obtuvo Akira después de volverse un Devilman lo hicieron tener fuerza y habilidades increíbles. Cuando Akira toma la forma de Devilman se vuelve muy poderoso, al nivel que no una horda de demonios o demonios fusionados pueden vencerlo, al contrario, él puede destrozarlos en pedazos rápidamente. Devilman tiene unas alas que le permiten volar y unas piernas muy fuertes que le permiten correr velozmente como una bestia.

Ahora que Akira tiene la fuerza de un demonio, también resalta su fuerza mental ya que muchas veces está bajo la presión de ayudar a los humanos, especialmente cuando son rehenes de demonios o son controlados por ellos. Para esto también debe de tener un corazón muy fuerte para enfrentar a algunos demonios, y sobre todo enfrentar las desgracias que van ocurriendo a su alrededor.

Mi querido Akira tiene algo que nunca cambió ni siquiera cuando tuvo el poder de un demonio: su sensibilidad. Y es que el siempre ve por los demás, siente demasiada empatía por todas las personas que termina llorando por ellas y no por algo que le haya pasado a él. Cuando ve a alguien llorar o escucha que le ha pasado algo malo a una persona, Akira no puede evitar llorar.

Akira demuestra que como humano y como demonio, los hombres también pueden llorar, él no llora por él ni para él, llora por la humanidad, por aquellos que no pueden y hasta por los mismos demonios, y esto demuestra una vez más que mi Akira-kun tiene el corazón más bondadoso que jamás hayamos visto en el anime.

La inocencia de Akira llega a grados que lo hacen confiar absolutamente en todos, más si es hacia sus seres queridos. Su confianza en la humanidad han hecho que pelee a muerte contra los demonios para salvarlos y siente que es su responsabilidad protegerlos hasta de ellos mismos. Cuando Akira comienza a tener problemas con Ryu sobre su forma de usar a otros humanos como carnada y al llamarlos débiles, Akira comienza por su lado a salvar a humanos y a deshacerse de los demonios que siguen comparándolo con ellos.

Akira sabe que aún hay humanos buenos y que como él se han convertido en Devilman, así que comienza a buscarlos para intentar salvarlos, ya que sabe que hay personas que tienen la fuerza para luchar contra los demonios. Cuando Akira se siente traicionado por su amigo y por la misma humanidad a la que trató de proteger, aún le quedará la esperanza de tener a su lado a los otros Devilman para luchar contra los demonios que hicieron tanto daño a la humanidad.