Comenzamos con una de las parejas protagónicas de School Rumble, anime cuya trama gira en torno a las alocadas relaciones amorosas de los estudiantes del Instituto Yagami. Kenji Harima, protagonista de la historia, y Eri Sawachika, una de las chicas más populares de su escuela, conforman una pareja marcada por la diferencia de estratos sociales y la inmadurez característica de los adolescentes.

Harima es un delincuente juvenil que se ha ganado la popularidad en su escuela gracias a la fama de chico problemático, mientras Eri es una niña rica que vive siempre malhumorada por el descuido de sus padres. Ambos tienen una relación de amor-odio muy cercana, y las constantes e infantiles peleas entre ambos terminan por obstinar hasta al más fanático espectador de la serie. Los celos de Eri y la indiferencia de Harima suelen ser el detonante de las peleas, habitualmente marcadas por la agresión física de la jovencita... y realmente, ¿hay algo de amor aquí?

Esta es la pareja protagónica de Kimi no Iru Machi, anime cuya trama continúa la historia relatada en el manga Suzuka. La casa de los Kirishima toma vida con la llegada de Yuzuki, una extrovertida jovencita que arriba a Hiroshima proveniente de Tokio para continuar sus estudios. Al vivir bajo el mismo techo y asistir a la misma escuela, es inevitable que los jovencitos se terminen gustando, dando lugar a una relación que marcaría sus vidas. Cual telenovela mexicana, ambos enfrentan una serie de inconvenientes que les impiden estar juntos, y cuando por fin lo logran esto genera el rechazo de sus amigos más cercanos.

Yuzuki siempre estuvo interesada en Haruto, desde que estaban en la preparatoria, pero éste tardó un poco más de lo esperado en darse cuenta. Las malas decisiones del jovencito, las locuras emocionales de ambos y el infortunio que pareciera perseguir a la pareja durante su juventud, marcan la trama de la historia. Solo hasta el final de la serie, y luego de mil desaciertos en su relación, terminan haciendo el amor. A menos que seas amante de las historias románticas con desencuentros, difícilmente soportarás a este dramático dúo.

En el octavo puesto nos encontramos con una pareja bastante inusual, ya que en la trama de la historia no son el eje central de la misma, y es después de mucho tiempo que ambos terminan casándose y teniendo una hija. Kayo Hinazuki, una jovencita tímida y solitaria marcada por su difícil entorno familiar, y Hiromi Sugita, amigo cercano del protagonista de la serie, solo parecieran, en principio, tener una cosa en común: el vínculo con Satoru Fujinuma.

Es precisamente Satoru quien durante la historia se encarga de ayudar a Kayo a superar los traumas de su niñez y adaptarse al grupo de compañeros de su escuela. Ambos terminan siendo grandes amigos y parecía inminente una relación amorosa entre ellos. Hiromi, por su parte, fue salvado de morir a manos de su secuestrador gracias a la habilidad de Satoru de regresar en el tiempo. Para muchos fanáticos de Boku Dake ga Inai Machi fue decepcionante ver cómo en el futuro Kayo terminó casándose con Hiromi y teniendo un hijo, cuando todo parecía indicar que ella y Satoru terminarían juntos.

Hablemos de una pareja marcada por la falsedad y las apariencias. Erika Shinohara es una jovencita superficial que suele presumir con los demás sus relaciones amorosas... las cuales, lamentablemente para ella, son ficticias. Kyouya Sata es un chico guapo y autoritario que suele aparentar ser una persona amable y servicial, por lo cual todas las chicas de su escuela lo consideran un príncipe. Obligada para no quedar mal con sus amigas, a quienes les había mostrado una foto de Kyouya (antes de conocerlo) diciendo que era su novio, Erika le ruega a Kyouya que comiencen una relación.

El sadismo y crueldad con la que Kyouya trata a Erika —a quien considera "su perro"— y la actitud complaciente de la chica para no quedar mal ante sus amigas, hacen de esta pareja una de las más repulsivas del anime. A pesar de lo mal que Kyouya la trata, Erika termina enamorándose de él y hace lo imposible para conquistarlo, algo que logra al final de la historia, cuando Kyouya se da cuenta que Erika es más que un simple pasatiempo para él.

Aquí todo está marcado por la personalidad yandere de Yuno. Este par le da vida a la trama de Mirai Nikki, serie que gira en torno a la habilidad de Yukiteru de ver el futuro cercano. Ambos terminan enamorándose, en gran parte, por la obsesión de Yuno con Yukiteru, a quien acosa constantemente, y es capaz de cualquier cosa con tal de mantenerlo siempre a su lado.

Yuki, por su parte, es un jovencito tranquilo y tímido, y en principio solo se relacionaba con Yuno para que ella lo protegiera. Luego de las diversas batallas que ambos libraron y de encontrarse con varias versiones de sí mismos provenientes de mundos paralelos del pasado y futuro, por fin consiguen vivir juntos luego de 4 mundos más. Muchos fans deseaban que en algún punto de la trama el pobre Yukiteru por fin se librara de su perenne acosadora; al final, encontró tranquilidad con la Yuno del Tercer Mundo. Una enfermiza, pero duradera relación.

Uno de los amores más “falsos” del anime. La típica relación basada en una promesa infantil que termina desvaneciéndose en el tiempo para uno (Raku), mientras para el otro marca su vida aferrado a una esperanza (Onodera). La ingenuidad y torpeza de ambos hace de este romance una historia sin fin, incluso a pesar de los constantes esfuerzos de Ruri, la mejor amiga de Kosaki, para facilitar la declaración mutua.

Raku sospecha que Onodera es la chica a quien 10 años atrás le juró amor eterno, pero a falta de pruebas fehacientes que lo confirmen, prefiere mantener sus sentimientos ocultos, más allá de que la considera su mujer ideal. Onodera, por su parte, también es dominada por su timidez, y las pocas veces que pareciera por fin estar dispuesta a dar el siguiente paso, algo la interrumpe. Aún al más romántico amante del Shoujo termina por aburrirle esta situación, especialmente porque este amor parece nunca avanzar.

Muchos aún no tienen claro por qué estos dos terminaron juntos, ya que los sentimientos de Sakura nunca fueron correspondidos por Sasuke... sin mencionar que Naruto parecía ser la opción romántica más viable para la kunoichi. Sin embargo, e incluso a pesar que Sasuke intentó asesinarla en varias oportunidades, después de su última pelea con Naruto el deuteragonista de la serie terminó arrepentido por sus crímenes, volvió a casa y se casó con su eterna enamorada, con quien tuvo una hija llamada Sarada.

Luego de mostrar una actitud fría y despiadada durante toda la serie, muchos fans hubiesen preferido que Naruto acabara con él; Sakura fue la única que gracias a su amor mantuvo su fe en Sasuke hasta el final. El sobreviviente del clan Uchiha encontró redención ayudando a eliminar el Tsukuyomi Infinito y consiguió la paz que nunca tuvo junto a Sasuke, en un final considerado por muchos como injusto con Naruto, quien finalmente terminó casándose con Hinata Hyūga.

Arribamos al podio de nuestro recorrido con los protagonistas de Guilty Crown, serie ambientada en el año 2029. Es otra relación en donde la chica carga con el peso de la misma; el amor de Inori por Shu es tal que está dispuesta a dar su vida por él, mientras este último está consciente de lo que siente por Inori, pero nunca termina de decirlo abiertamente debido a su timidez... aunque luego que Inori es capturada por Gai Tsutsugami, Shu centra todas sus fuerzas en liberarla.

Inori, al inicio de la serie, muestra rasgos de tsundere, aparentando ser una chica sin emociones. Tras conocer a Shu deja a la vista su lado más tierno, aunque también mostró toques muy oscuros al adquirir la conciencia de Mana. La falta de autoestima de Inori, quien se considera como una carga para los demás, hace que Shu subestime sus sentimientos por él, y de hecho, él hasta pensó que Inori y Gai eran amantes. Una pareja aparentemente inestable enmarcada por una trama muy oscura.

La perversión de Kirino, una otaku adicta a los juegos para adultos, termina por arrastrar a su distante e introvertido hermano mayor, Kyousuke, dando lugar a una perversa relación entre ambos. Kirino considera que los mundos 2D y 3D deben estar separados, por eso siempre niega sus sentimientos hacia Kyousuke; él, por su parte, procura vivir lejos del caos sentimental que le produce su hermana, refugiándose en sus estudios y su amor por el té.

Conforme avanza la historia, ambos hermanos dejan de lado sus prejuicios y expresan su amor abiertamente, a pesar de las críticas que pudieran recibir por esto. Al final, Kirino logró recuperar la chispa que su hermano mayor parecía haber perdido en su adolescencia y ambos se casaron. Idilio para los amantes del incesto entre hermanos, más allá del tabú generado alrededor de este tipo de relaciones amorosas.

Nuestra lista la encabeza una relación marcada por la personalidad yandere de la protagonista. En los múltiples finales de School Days hay un elemento común en la mayoría de ellos: Makoto y Kotonoha terminan juntos. ¡Y cómo no! La obsesión de esta chica es capaz de alterar cualquier realidad con tal de terminar al lado de su amado. Makoto es un jovencito estudiante de primer año de bachillerato, emocionalmente indeciso a la hora de elegir a su pareja. Para colmo de males, entre Sekai y Kotonoha terminan poniéndolo entre la espada y la pared.

Kotonoha es compañera de clase de Makoto y es su novia oficial. Sin embargo, la cercanía de Sekai termina consolidando un caliente triángulo amoroso, ya que Sekai y Makoto han tenido relaciones sexuales en reiteradas oportunidades. Los más de 20 finales de la novela gráfica repasan todos los escenarios posibles de esta acalorada relación, desde estar ambas chicas embarazadas de Makoto hasta ser este último arrollado por un tren luego de salvar a Sekai, quien había sido arrojada del mismo por Kotonoha. En el anime, obviamente, Makoto y Kotonoha no han mostrado menos: un enfermizo y alocado amor que da lugar a todo lo que puedan imaginar.