Con ARMS, Nintendo incursiona en el género de Peleas de una forma más tradicional que lo visto en Super Smash, pero sin que esto signifique la ausencia del clásico “giro Nintendo”, es decir, esa mecánica de juego que altera aquello a lo que estamos acostumbrados en el género. Aquí las peleas ocurren con brazos mecánicos extensibles que activas con el movimiento de los joy con. El título resulta muy divertido en la compañía de tus amigos una vez que comienzas a dominar los controles. Además, el genial diseño de los personajes ayuda a la amena experiencia de juego.

Si crees que ARMS es aburrido como e-Sport, es porque no has visto al señor Yabuki, director del juego, desatar sus más temibles puñetazos. Eso debería ser suficiente para demostrar que el título tiene potencial como juego competitivo. Potencial que quizá se desperdició un poco y que, para poder relucir, necesita cambiar un poco sus mecánicas de juego. Oh, bueno, quizá la inevitable secuela corra con mejor suerte.

SteamWorld Dig 2 inaugura esta lista como el primero de varios títulos indie que brillaron en el primer año de la consola. Como (digna) secuela del original SteamWorld Dig, este juego viene a aumentar y corregir muchos de los elementos y mecánicas introducidos por su antecesor. La mezcla de lo steampunk con lo western se sigue sintiendo tan refrescante y atractiva como hace cinco años.

Es sorprendente lo divertido y nada repetitivo que se siente explorar el subsuelo en
SteamWorld Dig 2. La búsqueda de materiales y el manejo de los recursos para mejorar tu exploración mantienen a cada pequeña aventura tan emocionante como la anterior. El juego podrá no ser muy extenso (unas 10 horas aproximadamente), pero el replay value del juego y lo adictivo que es explorar las minas harán que le saques el mayor provecho a cada centavo que pagues.

El mensaje de Stardew Valley es uno que resuena con fuerza en la actualidad: la vida laboral puede resultar abrumadora y deprimente; resultan esenciales los momentos de paz y tranquilidad, donde apreciamos la naturaleza y a las personas que nos rodean. Y esta mentalidad tiene eco en su gameplay y mucha de la filosofía de diseño del juego.

En ningún momento Stardew Valley te obliga a hacer algo o te castiga por jugar de cierta manera. Te presenta todo lo que puedes hacer en el juego (de manera dosificada para no saturarte) y te deja escoger a tu antojo. ¿Hoy quieres pescar? El clima parece bueno, amigo. ¿Trabajarás en la granja? Parece un día perfecto para hacerlo. ¿Prefieres socializar y encontrar pareja? Vida solo hay una, haz con la tuya lo que quieras y sé feliz. Qué hermoso y tranquilo juego.

No importa en qué consola aparezca, Mario Kart siempre es bueno. Son incontables las horas de diversión que esta saga nos brinda, así como los momentos memorables en la compañía de nuestros amigos. Mario Kart 8 Deluxe puede que sea la mejor iteración que ha existido hasta ahora. Las pistas, tanto las nuevas como las clásicas, se sienten únicas y aplican las características únicas de Mario Kart 8 Deluxe en su diseño. Así, podrás ir de cabeza o atravesar volando muchas partes de las pistas que en sus versiones originales, de GameCube o Nintendo 64, por ejemplo, esto no era posible.

Mario Kart 8 Deluxe, además, reclama su corona como el rey de los juegos multiplayer al introducir la opción de que tu kart se mantenga lo mayor posible en el centro de la pista. Ahora desde tu hermanito pequeño hasta tu abuela pueden pasar horas de diversión, pues no importa qué tan malos sean con el control, pueden tener un gran desempeño. Si cuentas con varias personas en la casa o disfrutas el juego en línea, Mario Kart 8 Deluxe hoy, como siempre, es un título imperdible en tu colección.

Splatoon ya demostró ser merecedora de estar en la misma casa que las demás mascotas de Nintendo. Triunfa no solo por el éxito comercial que ha tenido, sino por el hecho de que por fin tengamos un shooter competitivo en las consolas de Nintendo. Cuando los FPS y TPS se volvieron la sensación, nadie esperaba que la Gran N entrara con su versión de ellos porque, bueno, la violencia es algo que no cuadraba con el estilo de la compañía. Splatoon resolvió este problema al reemplazar las balas por pintura e incluso algunas armas por objetos tan chistosos como rodillos.

Splatoon 2 aumenta no solo la cantidad de armas y modos de juego, también da ajustes menores y mayores al juego base para que incluso aquellas personas que jugaron el original sientan que es una mejora sustancial sobre su antecesor. Solo queda una pregunta, ¿eres un niño o un calamar, o, quizá, ambos?

Cuando Mario + Rabbids Kingdom Battle se filtró hace unos meses, la respuesta fue abrumadoramente negativa. Y, honestamente, eso no resultó sorprendente. Después de todo, los Rabbits son como los Minions de los videojuegos, igual de molestos. ¿Cómo era posible que se juntaran con la realeza del medio, Don Mario Bros.? Todavía no había salido y los gamers ya lo daban por muerto. Algunos lo llamaban ya el peor juego del año, incluso de la década.

Cuál sería nuestra sorpresa cuando comprobamos por nosotros mismos que la combinación de
Mario y los Rabbits no solo funcionaba, sino que Mario + Rabbids Kingdom Battle era un juego genial. La verdad es que comenzamos a sospecharlo que no sería tan malo como parecía cuando Davide Soliani, director creativo, lloró durante el E3 2017 cuando el mismísimo Shigeru Miyamoto aclamó su título. Esto era evidencia de que Soliani había dado lo mejor de él en el desarrollo.

El esfuerzo dio frutos: el resultado es un extraordinariamente divertido videojuego donde, increíble pero cierto, una de las mejores partes fueron los personajes de los Rabbids y el humor que inyectaron en el juego. Si logras dejar a un lado tus prejuicios y le das una oportunidad a Mario + Rabbids Kingdom Battle, descubrirás en esta extraña de personajes y gameplay (XCOM y Mario, ¿cómo es que funciona?) uno de los mejores juegos que ha tenido el Switch hasta ahora. Ya esperamos una secuela.

La verdadera sorpresa del Switch en el 2017 fueron los indies. Es increíble la cantidad de juegos independientes que llegaron a la consola. Y es gracias a la calidad de muchos de estos, en buena parte, que el Switch ha tenido tanto éxito. Prueba de ello es Golf Story, un pequeño juego de RPG exclusivo para la consola que llegó para sorprendernos el pasado septiembre.

El encanto de este título es que cambia las mecánicas de combate tradicionales de los RPG por partidos de golf. ¿No te gustan los juegos de golf? No importa, juega Golf Story. Su historia está tan llena de carisma y humor que no importa si odias este deporte de precisión; encontrarás algo que puedas amar en él. Pero si, por otro lado, amas el deporte, estarás más que satisfecho con lo que Golf Story trae a la mesa.

Gracias a la cantidad de secretos y cosas que puedes hacer en el juego, gracias al divertidísimo gameplay y gracias a los excéntricos y memorables personajes que encontrarás en tu aventura, Golf Story se consagra como un juego imperdible para todo dueño de un Nintendo Switch.

¡Embárcate en una épica aventura en búsqueda del paraíso para la humanidad! Eso es Xenoblade Chronicles 2 y debemos confesarte que nos divertimos mucho más con él de lo que esperamos en un principio. Nuestras más de 100 horas de juego son muestra clara de ello. Y es que el mundo que exploramos es vasto, hermoso y simplemente nos invita a explorarlo. La historia también es un punto fuerte a notar. Algunas decisiones en el diseño del juego son… cuestionables y creemos que un par de meses extra en el horno le hubieran servido, pero esto no es nada grave como para distraerte de lo genial que es el juego en general.

Por fortuna, a pesar de lo que el número dos del título podría indicar, no necesitas realmente haber jugado los títulos anteriores. Xenoblade Chronicles 2 es un videojuego que puedes disfrutar incluso si es tu primer acercamiento a la franquicia. Esto se agradece porque no sabemos qué sería de nuestras vidas ahora si, por alguna razón, nos hubiéramos perdido del genial soundtack con el que cuenta Xenoblade Chronicles 2.

Para que te des una idea de la calidad del juego, un amigo nuestro que jamás se había acercado a un videojuego de este estilo nos dijo: “En este juego descubrí el verdadero sentimiento por una waifu”. Olvídate de los galardones y demás reconocimientos, críticas como estas son las que venden juegos.

Mario es un verdadero ícono de los videojuegos. Sin duda alguna, el más grande que tiene la industria. Y Super Mario Odyssey es la celebración de los más de 30 años de existencia del plomero barrigón, y no solo hablamos a las múltiples referencias que podemos encontrar a lo largo del juego. Cada mecánica de Super Mario Odyssey es el resultado de pulir y perfeccionar aquellas que desde un inicio lo hicieron grande.

El mejor ejemplo de esto es, sin lugar a dudas, la cantidad de opciones que tienes para controlar a Mario. Vamos, desde sus inicios Mario ha contado con una fluidez en el control envidiable. Pero la incursión de Cappy en Super Mario Odyssey abre una multiplicidad de opciones en el juego como nunca las habíamos visto antes. Y se sienten tan naturales e intuitivas que resulta increíble que no hayan sido incorporadas con anterioridad a los juegos de Mario. En serio, te invitamos a revisitar títulos pasados justo después de probar Super Mario Odyssey. Te aseguramos que lo primero que notarás es que tu control sobre el plomero se ha visto coartado. Todas aquellas alturas que antes alcanzabas con facilidad han quedado fuera de tu alcance. Uno nunca sabe lo que tiene hasta que lo ve perdido.

Super Mario Odyssey nos recuerda que los videojuegos deben ser, sobre todas las cosas, divertidos. Y esto triunfa de forma absoluta. Para el final de tu aventura te encontrarás atravesando los creativos niveles con una sonrisa en el rostro y un goce que te hará sentir como niño de nuevo. De eso están hechos los mejores juegos del mundo: diversión pura.

Solo había dos posibles opciones reales para llevarse el primer lugar de esta lista, tú lo sabías y nosotros lo sabíamos. Si no era Super Mario Odyssey, debía ser The Legend of Zelda: Breath of the Wild. El Switch comenzó su vida con el pie derecho y su amuleto de la buena suerte fue The Legend of Zelda: Breath of the Wild. Estamos seguros de que si siguiera con nosotros, el señor Iwata hubiera estado sumamente orgulloso del resultado final, tanto del Switch como de Breath of the Wild.

La decisión entre Odyssey y Breath of the Wild no fue sencilla, pero la elección final la podemos resumir en esto: Odyssey es una obra maestra de los videojuegos, pero Breath of the Wild es una auténtica experiencia. Por eso mismo nos quedamos con la aventura de Link a pesar de sus fallas. Recorrer las llanuras y las montañas, los lagos y el desierto, la selva y los castillos que Hyrule tiene en su reino es simplemente único.

Con cada lugar del juego tenemos asociado una memoria de lo que hicimos ahí. Descubrimos el mundo que se desdoblaba ante nuestros ojos, así como todas las posibilidades que teníamos para interactuar con él. No es diario que volvemos a sentir alegría y esa insaciable curiosidad infantil que nos hace querer verlo todo.

Muchos juegos son populares, pero solo unos pocos se convierten en verdaderas leyendas. No importa cuántos años pasen, estamos seguros que seguiremos cantándole baladas y odas, muy merecidas, a The Legend of Zelda: Breath of the Wild.