DayZ es un caso curioso. Siendo realmente críticos con el juego, como deberíamos de serlo, no podríamos considerarlo un buen juego. Se encuentra en desarrollo desde hace ya demasiados años, está plagado de bugs y glitches y el rendimiento del juego deja mucho (mucho) que desear. ¡Y a pesar de todo es sumamente divertido!

En DayZ no solo tienes que sobrevivir a las multitudes de zombies, también a otros jugadores humanos que luchan por sobrevivir en un mundo abierto. Es más, a veces lucharás más contra otros humanos que contra los mismos zombies. Además, los ataques sorpresa de ejércitos de zombies le suma muchos puntos. ¿Y sabes qué le sumaría más puntos? Que por fin terminen el juego y lo pulan tanto como una idea tan genial como esta merece.

Los tiempos de las arcades o maquinitas fueron gloriosos para los videojuegos de zombies. La posibilidad de usar un aditamento con forma de pistola permitía que este tipo de juegos fueran divertidos en maneras que sus contrapartes de consola no podían serlo. Y el mejor exponente de esta era, sin duda, The House of the Dead. Con una gran variedad de enemigos, emocionantes batallas contra jefes y un soundtrack que te mantiene moviendo la cabeza mientras vuelas las de los zombies, The House of the Dead es diversión pura garantizada. La segunda entrega de esta franquicia mejora todo lo que hace bien la original y al hacer su acción más frenética, la diversión aumenta.

Sin embargo, lo que hace tan emblemático a este título es su actuación de voz… por las razones equivocadas. En pocas palabras, es terrible, pero en el sentido de “es tan malo que es bueno”. Las líneas son pronunciadas con un tono plano o con una emoción que no es para nada adecuada al momento. Escuchar al supuesto héroe del juego balbucear un “My God” sin mucho interés cuando un pobre civil muere le da a The House of the Dead 2 el carisma que necesita para ser recordado.

¿Parkour y zombies? La combinación suena sumamente extraña en un primer momento, pero una vez que te paras a considerarlo tiene mucho sentido. Las personas más capacitadas para sobrevivir en un apocalipsis zombie son aquellas que están lo suficientemente en forma como para realizar las acrobacias vistas en el parkour. Después de considerar esto, resulta curioso que no se haya explotado esta combinación en los videojuegos antes.

No importa que no haya más juegos con este estilo cuando Dying Light lo hace tan bien. El mundo abierto combinado con un estilo de juego que nos recuerda a Mirror’s Edge hace que trasladarte de un lado a otro sea fluido y entretenido y hace que el combate sea increíblemente satisfactorio. En un género tan trillado como a veces puede ser el de zombies, resulta muy agradable ver propuestas novedosas como la que Dying Light trajo a la mesa.

Y hablando de propuestas interesantes y divertidas tenemos que mencionar a Dead Rising. En Dead Rising tomas el papel de Frank West, un fotógrafo que queda atrapado dentro de un centro comercial en medio de un ataque zombie. Como buen reportero, Frank busca descubrir la verdad detrás de esta infestación. Por fortuna, quedar atrapado dentro de un centro comercial tiene sus ventajas.

Pistolas, espadas láser de juguete, sombrillas, escobas, motosierras, barrotes, podadoras, carros de supermercado, todo en este juego es un arma esperando ser blandida. Y vaya que es divertido ponerse creativo con todas estas opciones. Y si a esto le sumas la increíble cantidad de zombies que aparecían en pantalla, especialmente para su tiempo, tienes una experiencia sumamente divertida. Tan solo hazte a ti mismo un favor y mantente lo más alejado que puedas de la versión de Wii.

Rockstar Games es una gran compañía capaz de desarrollar videojuegos divertidos y memorables. Por eso no resultó sorprendente que cuando se adentraron en el viejo oeste con Red Dead Redemption el juego resultó ser una verdadera joya. Si hay algo que nos gusta más que un gran juego es una excelente expansión. Red Dead Redemption: Undead Nightmare cumple todos los requisitos. ¿Zombies en la tierra de los vaqueros? ¡Dos para llevar, por favor!

Como un gran homenaje a esas películas que son tan malas que son buenas, Red Dead Redemption: Undead Nightmare disfruta lo ridículo de su premisa. Y si no nos crees, considera que puedes montar a los cuatro caballos del Apocalipsis o buscar a Pie Grande. Por supuesto que todo esto no es sinónimo de un mal juego, al contrario, a pesar de su premisa ridícula, Rockstar sabe lo que hace y lo que hace son grandes juegos.

Oh, Valve, cómo extrañamos esos tiempos maravillosos cuando hacías videojuegos. ¿Puzzles? Obra maestra. ¿Shooters? Obra maestra. ¿Juegos de zombies? ¡Así es, obra maestra! Si el original Left 4 Dead es un gran juego, la secuela llega y dice: “¿Ese juego? Apesta. Aquí está realmente lo bueno”. No hay ningún aspecto que Left 4 Dead 2 no mejore. Mejor combate, mejores campañas, más modos de juego, vamos, hasta los personajes tiene mucha más personalidad.

Pero cuando la mayoría de las compañías se quedarían satisfechas con eso, Valve va un paso más allá de lo requerido. Y es gracias a eso que Left 4 Dead tiene un puesto tan alto en esta lista. Left 4 Dead 2 es la experiencia multijugador de zombies por excelencia. Nuevos juegos siguen superándose en las campañas de un jugador, pero sin importar cuántos años pasen, Left 4 Dead 2 no tiene rival en cuanto a campañas cooperativas se refiere. Que fluya la sangre y que siga la música.

Resident Evil es el videojuego por excelencia de zombies. Hasta personas que no son muy aficionadas al control piensan inmediatamente en Resident Evil cuando se les menciona este género. A pesar de su enorme popularidad, la franquicia no logró su esplendor sino hasta la cuarta entrega.

Lo más curioso es que Resident Evil 4 no es nada como sus antecesores. Para empezar, deja un poco de lado el género de survival para enfocarse más en el de acción, también el tono del juego es distinto y algunos debatirían que los enemigos no son realmente zombies (nosotros sí los consideramos como tales). Podría parecer que de Resident Evil solo tiene el nombre.

Aun así, el ritmo del juego y su jugabilidad lo hacen brillar como pocos juegos en la franquicia y en un videojuego eso es mucho más importante que la fidelidad a sus antepasados. Resident Evil 4 sorprendió al mundo con su gran diseño y el cuidado riguroso con el que están construidos los niveles. Esto se complementa con mecánicas sumamente interesantes e innovadoras, como la capacidad de interactuar con el ambiente para ponerte en ventaja.

Por supuesto, Resident Evil 4 no es un juego perfecto y algunas de sus fallas son evidentes (*cough* Ashley *cough*), pero todos sus aciertos superan con creces sus errores. Hasta sus NPC son memorables, como es el caso de Merchant y su clásico “What are you buying?”. Es indudable la influencia que ha tenido Resident Evil 4 no solo en los juegos de zombies, sino en los shooters en general; popularizó la mira por encima del hombro, por ejemplo. Muchos han tratado de imitar la fórmula que Resident Evil 4 perfeccionó, pero pocos han triunfado como lo hiciera este titán emblemático hace más de una década.

Zombies Ate My Neighbors no fue el primer videojuego de zombies, pero ciertamente es de los más importantes. Aunque en su momento no tuvo ventas sorprendentes, su carisma pronto elevó este título al nivel de juego de culto y con justa razón. Creado por el legendario LucasArts, en Zombies Ate My Neighbors juegas como Zeke y Julie, dos jóvenes que buscan salvar a su vecindario de zombies, hombres lobo, alienígenas, insectos gigantes, vampiros y hasta bebés demoníacos.

Sobra decir que Zombies Ate My Neighbors es una carta de amor a las películas de monstruos de la época. Cargado de humor y referencias, el concepto de juego es sencillo, pero la ejecución es lo que lo hace brillar. El combate es sorprendentemente complejo con la multitud de armas que puedes conseguir y los más de 50 niveles que puedes enfrentar. ¿Sabes qué es lo mejor? Zombies Ate My Neighbors es un videojuego cooperativo ¡en el Super Nintendo! Puedes compartir la diversión con un amigo y rescatar a todo el vecindario. Las palabras no son suficientes para explicar lo entretenido que es Zombies Ate My Neighbors así que pruébalo tú mismo.

Es claro que la fortaleza de The Walking Dead reside principalmente en su narración y en la forma en que desarrolla sus personajes. Tus acciones tenían consecuencias y cambiaban (aunque fuera a pequeña escala) el desarrollo del juego.
Esto, inevitablemente, te hacía considerar cuidadosamente tus acciones. “¿Qué ramificaciones tendrán mis actos, cómo afectarán a los demás, me ayudará esto a sobrevivir?” Si esto de por sí no era sencillo, lo era todavía menos en las situaciones de alto estrés, donde un pequeño error significaba consecuencias terribles. Pero quizá la pregunta más importante que te provoca este juego es “¿Lo que hago es lo mejor para Clementine?” Porque no podemos hablar de The Walking Dead sin mencionar a Clementine. Esta pequeña niña le otorgó al juego ese toque humano que todas las grandes historias con zombies necesitan.

El tema principal de las historias que involucran a los no muertos es la pérdida de lo que nos hace humanos. Y no nos referimos solamente al hecho de convertirse en monstruo tras ser mordido. No, perdemos nuestra humanidad cuando caemos en pánico y recurrimos a la violencia y a la traición para sobrevivir. Cuando ponemos nuestra vida sobre la de los demás sin importar lo que tengamos que hacer. Clementine nos recuerda que el sentimiento más humano es la empatía y sin importar lo difícil que sea la situación debe ser este el que guíe nuestras acciones. La inocencia de Clementine sirve para reflejar nuestra propia personalidad, ella crece aprendiendo de nosotros y nos muestra quién somos realmente. Pocos videojuegos pueden provocar una introspección como lo hace The Walking Dead.

The Last of Us es un gran juego. Punto. Así es, The Last of Us, a diferencia de muchos de los títulos incluidos en esta lista, brilla con la misma fuerza ya sea si se le compara con otros juegos de zombies o con clásicos de la industria. Excelente libreto, actuaciones maravillosas por parte de los actores de voz, personajes memorables y un gran gameplay como cereza de este pastel. Lo que Naughty Dog logró con The Last of Us no puede ser calificado con menos de obra maestra.

De forma similar a The Walking Dead, en The Last of Us no somos los verdaderos protagonistas de esta historia. No, ese rol le corresponde a Ellie, la joven compañera de Joel. Llena de bromas y ocurrencias, Ellie (y también Joel) es un personaje desarrollado por completo. Pocos los hay así en los videojuegos. Y, por si fuera poco, a diferencia de muchos acompañantes, Ellie en verdad resulta útil en tu aventura. The Last of Us es una historia con cerebro, pero también con mucho corazón. Cada momento de juego está cargado de sentimientos. Cuando no estás riendo, estás llorando. Esa es la fuerza del impacto que tiene sobre de uno.

Todo gamer se debe a sí mismo jugar esta joya, sin importar si es fan o no de los videojuegos de zombies. The Last of Us hace más que ponernos a disparar contra hordas de no muertos, cambia nuestra postura en temas como la moral y el amor. The Last of Us es una obra que te acompañará por el resto de tu vida. Pero no me creas a mí, ve y compruébalo por ti mismo y verás que pocas experiencias de zombies, no solo en los videojuegos, se comparan a The Last of Us.