Catherine es una historia tejida entre el sueño y la realidad, una decisión entre la estabilidad de la vida o la incertidumbre de lo desconocido. Este juego nos pone en la piel de Vincent Brooks, un hombre de 32 años en medio de una relación con Katherine Mcbride; las cosas entre ambos podrían ir perfectamente si no fuera porque ella busca lo normal en la sociedad: casarse, tener hijos, asentarse... y esto es algo para lo que Vincent no esta preparado. La aparición de Catherine, una sexy y dulce joven que parece estar loca por él, comienza a complicar sus dudas sobre cómo debe vivir su vida, y crecen los fantasmas de la infidelidad. La vida de Vincent se vuelve literalmente una pesadilla ante este dilema, y es aquí donde el jugador debe ayudar al protagonista a solucionar sus problemas.

Lo más extraño de Catherine es la jugabilidad. Aunque en el mundo del despertar controlas a Vincent en espacios cerrados, es cuando sus ojos se cierran que entramos al mundo de la pesadilla. Aquí debemos guiar a nuestro protagonista por una tortuosa montaña de bloques que deberá mover para poder maniobrar alrededor y llegar a la cima, donde le espera la salvación. ¿Esto no te parece suficientemente raro? Pues entonces añadimos que en sus pesadillas, Vincent va vestido solo con su ropa interior, unos extraños cuernos de carnero y con su almohada como arma.

Cuando hablamos de Eledees, es muy probable que para algunos sea un misterio... y para otros un recuerdo muy agradable, ya que Eledees fue un juego de Wii con un concepto interesante que por desgracia no fue tan conocido. Contar la historia de los Eledees, estos pequeños seres repletos de energía eléctrica, es contar también la historia del protagonista de esta mágica aventura, ya que Kai y estas criaturas están unidos desde el nacimiento del pequeño. A pesar de su desagrado por ellas, Kai se propone descubrir qué es lo que les está afectando tanto para así reestablecer la energía de todo el vecindario.

Aunque puede ser hasta tierno hay que admitir que el planteamiento del juego es extraño. Kai emplea una pistola de captura para remover todos los objetos de la casa en busca de Eledees, creando una mecánica de juego muy inusual pero interesante, ya que durante las fases hay límites de destrucción y hasta debes controlar el estado de ánimo de los Eledees al capturarlos, ya que no dan la misma energía siempre y hay que ser un cazador muy meticuloso, tanto enfrentándote a los normales como a los jefes.

Michael Jackson’s Moonwalker es un juego con varias versiones ligeramente distintas, creadas en honor de la película Moonwalker, que a su vez está compuesta por 8 videos cortos creados en honor del famoso cantante y bailarín Michael Jackson. El juego nos pone en la piel de Michael, que debe recorrer los distintos escenarios recuperando a los niños secuestrados —vaya ironía— por el villano de la película, llamado Mr. Big, enfrentándose a un gran número de matones armados.

Un “juego sobre una película sobre un cantante” está destinado a ser extraño, y Moonwalker no es la excepción, ya que aparte de la poca historia que tiene y a pesar de las diferencias entre formatos, la base sigue siendo un juego en el que Michael Jackson pelea al ritmo de algunos de sus temas más famosos. Cabe destacar que uno de sus movimientos especiales mata a los enemigos por… bailar, ya que al activarlo todos se ponen a hacer una coreografía al unísono y caen fulminados.

Este juego trata del ninja más eficiente que la madre naturaleza jamás creó, la única criatura que zumba en la oscuridad retándote a tomar acción y darle caza, pero que en el momento en el que te levantas con furia desaparece como si jamás hubiera existido... hasta que se apaga la luz de nuevo. ¡Malditos mosquitos! En este videojuego atormentamos a la familia Yamada, que serán víctimas del ataque de un hambriento mosquito que busca obtener suficiente sangre para pasar el invierno sin problemas. Por simple que parezca, el juego es relativamente complicado desde el comienzo, por lo que a pesar de no tener historia real se puede volver interesante y divertido.

La jugabilidad es bastante simple: el mosquito debe volar, atacando a los miembros de esta familia en distintos momentos del día para sacar cierta cantidad de sangre de alguna parte concreta de sus cuerpos. Hay que controlar un medidor de estrés, que debe mantenerse estable para evitar alarmar a la familia de la presencia de este invitado no deseado, ya que en caso de ser alertados empezarán a dar manotazos, y un solo golpe supondrá la muerte. Igualmente, alertar a los humanos no es el final, ya que se puede reducir su nivel de alerta mediante una especie de combate en el que se debe atacar a puntos concretos, como si de una extraña sesión de acupuntura se tratara.

¿Alguna vez te has preguntado cómo sería la vida de una cabra? Pues estás de enhorabuena, ya que Goat Simulator te permite hacer realidad tus más locas fantasías. En este simulador podrás ser una cabra, correr como una cabra, embestir gente como una cabra lo haría, e incluso vivir el apocalipsis zombie desde el punto de vista de una cabra, gracias a la expansión GOATZ. Ciertamente, una maravilla de la tecnología.

¡Lo raro de este juego sobresale por cuenta propia! Si bien es cierto que es muy original, básicamente es un Sandbox con una cabra como protagonista, por lo que aunque en un comienzo no parece mucho, es bastante divertido por el planteamiento tan increíblemente extraño y la libertad de acciones que permite. El juego se mantiene siempre dentro de las cosas que una cabra puede realizar, así que no esperen coger un jetpack y.... ¡ah, esperen! que sí hay jetpacks para cabras en este juego. Si disfrutan lo absurdo y los mundos abiertos para correr y explorar, Goat Simulator es su juego.

Al hablar de este juego, hablamos del segundo juego más siniestro de esta lista, y uno de los más extraños pese a su simpleza. Who's Your Daddy es un juego PvP que enfrenta a dos jugadores, no con pistolas, hechizos o invocaciones, sino con una competición por ver quién deniega el objetivo al otro: un jugador es el padre y el otro es un bebé, siendo la condición de victoria de el último el encontrar una manera de suicidarse usando todo lo que hay dentro de la casa, y siendo el objetivo del padre que su bebé no se suicide.

Este juego es realmente original y muy extraño a la vez, ya que aunque emplea el conocido modo de juego en el que un equipo trata de lograr algo y el otro equipo debe impedírselo, lo hace con un tema tan siniestro como el suicidio y la muerte de un hijo. Seguramente no es apto para todo público, pero no podía quedar afuera de la lista… y hasta es recomendable, si lo tomas con cierto humor.

Hatoful Boyfriend nos pone en el papel de la nueva estudiante del instituto St. Pigeonation’s, un lugar donde tanto los estudiantes como el personal son aves superdotadas. Por extraño que parezca, nuestra protagonista no puede tener un año sin amor en este nuevo lugar, por lo que el juego nos da la oportunidad de elegir con qué pájaro quieres tener una relación amorosa de todos los emplumados candidatos. El juego tuvo una gran acogida no solo por lo absurdo y divertido de la trama sino porque la historia, en principio simple, oculta una gran cantidad de secretos.

El amor entre humanos y aves es un tema... poco explorado, por decir algo. Lo normal que se desarrolla la trama es hasta inquietante, pero no se vuelve realmente extraño hasta que el jugador tiene acceso al modo Bad Boys Love, que permite ahondar en situaciones que la historia normal dejó caer sin entrar en detalles anteriormente. En general, Hatoful Boyfriend es un juego sorprendentemente profundo para la base sobre la que se asienta.

Es normal que en ocasiones te toque cubrir los errores de un familiar —o viceversa—, y justo esa es la base de Katamari Damacy. El Rey del Cosmos destruye por accidente todas las estrellas, y es la misión de su pequeño hijo el empezar a reconstruirlas, tarea que realiza con una bola mágica llamada Katamari, con el poder de pegarse a cualquier material u objeto de menor tamaño que ella. Una vez haya conseguido suficiente volumen, el príncipe podrá usarla para crear una estrella, y poco a poco repoblar el ahora vacío universo.

La rareza de este juego no es que trate básicamente de rodar por variados escenarios, destruyéndolos a medida que tu Katamari arranca pedazos del mismo y crece exponencialmente hasta alcanzar el tamaño requerido. Lo extraño es lo inmensamente divertido que esto resulta, desde que atrapas cosas pequeñas como animales, buzones, y demás, hasta cuando empiezas a arrancar casas o vehículos para ver crecer tu Katamari y alcanzar las estrellas.

Es posible que alguna vez se hayan puesto a pensar en sus propios sueños, quizás imaginando cómo son los sueños de los demás. Es posible que este simulador les de una pequeña respuesta, ya que es literalmente un viaje a través de un mundo de sueños psicodélico y carente de razón o función. Este juego no sigue una historia definida sino que nos manda de sueño en sueño durante un tiempo limitado, y aunque pases dos veces por el mismo sitio, nada te asegura que sea igual a la vez anterior, por lo que es un juego con infinitas posibilidades en un sentido muy literal.

LSD: Dream Simulator es profundo en muchos sentidos, y por eso mismo muy entretenido pero perturbador; es obvio que, como los sueños reales, este juego no muestra algo precioso siempre... de hecho, a menudo mostrará cosas bastante siniestras, como lugares con ojos en las paredes o criaturas agresivas que se abalanzan encima del jugador sin dudarlo. A pesar de que por norma general un mismo lugar no se verá igual dos veces, el modo flashback se desbloquea a lo largo de la partida, y nos permite revisitar los lugares en los que estuvimos durante la aventura, logrando así revivir un sueño que quizás ya creíste olvidado tiempo atrás.

Nos encontramos ante la fusión perfecta entre el baloncesto y lo absurdo más puro, por lo que agárrense, que el argumento de este juego promete curvas. Este juego es una secuela muy loca creada por fans del juego Barkley, Shut up and Jam, que era un juego de baloncesto mucho más normal. Como en el original, esta versión nos pone como protagonista al jugador de baloncesto Charles Barkley, sin embargo, en esta versión Barkley es un prófugo de la ley de un mundo futurista, siendo culpable de la muerte del público de su último partido.

Tras esa situación, se prohíbe el baloncesto y se da caza indiscriminada de los jugadores a causa de una hundida devastadora llamada “Chaos Dunk” que él mismo realizó de manera accidental. Por desgracia, esto es solo el comienzo, ya que tiempo después un segundo “Chaos Dunk” ocurre y Barkley se ve obligado a huir de los perseguidores que le culpan por esta nueva catástrofe.

Este juego es definitivamente el más extraño de esta lista, pero justamente por eso es tan genial, ya que está hecho empleando un sistema de combate muy similar al de Mario & Luigi: Superstar Saga y un sistema de viaje típico de los JRPG. Fácilmente se puede ver el cariño con el que se hizo, a pesar de lo absurdo de la historia, los personajes —entre ellos, algunos de la película Space Jam— y el mundo futurista en el que se sitúan. Todo esto redunda en un juego muy digno de ser jugado, y que probablemente muchos disfrutarán, a pesar de los gráficos.