El cielo es el límite cuando se trata de cosplay. La creatividad es el fundamento de este arte floreciente. Todo, desde el arte de papel para espumar a los termoplásticos se ha utilizado para crear armaduras, utilería y otros accesorios. La costura es también una habilidad de requerir para el cosplay y ha influenciado a muchos a practicar esta habilidad muy útil, pero para aquellos que desean permanecer en el lado barato de las cosas, el armario es el mejor lugar para buscar en primer lugar. La alteración de ropa vieja realmente puede traer un nuevo propósito a la camiseta que no usas hace 2 años y ahorras dinero a largo plazo.

No hay dos cosplays que sean exactamente iguales e incluso aquellos que eligen representar el mismo personaje, tienen su propia interpretación de los materiales o puntos de sutura del traje que fue cosido para lograr el cosplay de cada persona única y una manera de mostrar la expresión personal a través del personaje.

Ha habido varios argumentos prominentes entre los cosplayers que giran alrededor de la etiqueta, la construcción y el material de origen. Uno de los problemas más graves implica acoso sexual por otros fanáticos pervertidos que toman los cosplays más reveladores como una invitación para tocar. El cosplay es un movimiento de No Consentimiento que ha tomado la delantera en la educación de los asistentes de convenciones en cómo NO comportarse alrededor de los cosplayers. El movimiento se esfuerza por reducir el acoso que muchos cosplayers enfrentan al asistir a convenciones.

En relación con el acoso sexual, muchos cosplayers también están descontentos con la imagen de la mujer dentro de los mundos de ficción y cómo muchas de ellas a menudo están expuestas. Las personas que decidan hacer cosplay de personajes más reveladores son a menudo objeto de crítica y acusados de búsqueda de atención. Esto simplemente no es verdad.

Mientras que de hecho el el atuendo de las mujeres dentro de los medios de comunicación debe ser más inclusiva para todo tipo chicas, la elección de un cosplay de un personaje que se viste con un traje más abierto no equivale a moral baja.

Alejándose del tratamiento de las mujeres dentro de la comunidad, el mayor debate entre los cosplayers gira en torno a los que optan por comprar su cosplay frente a los que toman su tiempo para elaborar su propio. Muy a menudo los que compran sus cosplays son despreciados como inferiores a los que decidieron crear la ropa su propia cuenta. Ninguno de los dos es superior al otro ya que ambas opciones son viables.