Su relación data desde que eran jóvenes hasta la actualidad, y durante muchos años el comportamiento entre ellos ha tenido como constante el trato violento y mal sonante, hasta el punto en donde el jefe de los Varia ha manifestado —sin ningún atisbo de broma— que su mano derecha no es más que una escoria. Sin embargo, para Xanxus no hay persona más confiable y leal que Squalo, y viceversa. Ellos definitivamente mantienen un vínculo amor/odio que raya en la tensión sexual.

Durante la batalla por los anillos de la Familia Vongola se puede observar la habilidad que tiene Squalo para manejar la agresiva personalidad de Xanxus, hazaña que ningún otro miembro puede hacer. También, otra muestra del aprecio que existe entre ellos es la promesa de Squalo sobre no cortar su cabello hasta no ver a Xanxus convertido en el jefe de la Familia Vongola. Por estas muestras de afecto y comprensión es que los fans del Yaoi amamos esta pareja que sin dudas tiene su encanto.

Desde su primera aparición, Lambo ha tenido como objetivo acabar con la vida de Reborn, pero todos sus planes han fracasado de manera estrepitosa. Su infantil y enérgica personalidad del miembro más pequeño de la Familia Bovino, causa en Reborn el deseo incontrolable de molestarle y tenderle trampas cada vez que puede. El fandom usualmente representa a esta pareja en su etapa adulta, donde Lambo tiene 15 o 25 años, mientras que Reborn no tiene la medición de los Arcobalenos y regresa a su tamaño real.

Reborn es un personaje con muchos misterios y un pasado aún más raro; desde su llegada a Japón se ha mostrado con ideas y actitudes estrafalarias y extrañas, llamando la atención de todos los a su alrededor. Sin embargo, saca su lado más infantil cada vez que en el panorama entra Lambo al cual siempre le sigue el juego en sus intentos de matarle, pero todo cambia cuando se enfrentan en una batalla, al ser el Bovino el guardián más pequeño de los Vongola, usualmente lo obligan a mantenerse fuera del peligro y a cuidar de que no le pase nada.

Rivales, aliados y... ¡nuevamente rivales!, así se puede definir el vínculo que ellos poseen durante toda la serie. La personalidad apacible y dócil que demuestra Tsuna cada vez se encuentra cerca de la presencia de Mukuro, hace que nuestra desbocada imaginación haga de las suyas... y eso sin contar que en muchas ocasiones el futuro jefe de la familia más grande de mafiosos siente escalofríos cada vez que lo ve. Si esto no termina de hacerte pensar en que entre ellos hay “algo más”, tenemos la constante pregunta de Tsuna sobre su estado físico cada vez que hablan.

Todas estas señales dan pie a imaginar una relación del tipo seme sádico y uke sumiso, ¡pero no todo el crédito sobre nuestras ideas para este emparejamiento se las lleva Tsuna! Por el lado de Mukuro se puede observar ese deseo casi obsesivo de “poseer su cuerpo”, y si bien el contexto en el anime es otro, esta simple frase ha sido la causante de muchos fanfics, doujinshis y fanarts hayan salido a la luz, avivando así mucho más el fandom Yaoi de la serie.

Como jefe del comité disciplinario de la escuela Namimori, Hibari Kyouya es alguien respetado y al mismo tiempo es temido. Por eso, no es para nada una sorpresa que sea Dino Cavallone su “pareja ideal”, especialmente debido a que durante su enfrentamiento inconcluso demostró no solamente que es un digno rival, sino que además tiene el carisma y las habilidades de combate y liderazgo por las cuales Kyouya se siente atraído. Por ello lo toma como maestro con la excusa de su ayuda para mejorar sus destrezas en el combate, y en un futuro “morder hasta la muerte” a su mentor.

Ahora, si a la fría personalidad de Kyouya con su contraste y la cálida y afable personalidad de Dino, le incluimos ese gusto hacia los látigos, esposas y tonfas, da como resultado que las fujoshis y fudanshis tengan mucho material para imaginar que esas armas son usadas para fines más... recreativos. Ellos tienen una buena química, cosa que se evidencia en el arco de la “Batalla final del futuro”, donde se percibe una relación más íntima; por estas y otras razones, el D18 es una de las parejas con más demandas en el fandom.

Hayato Gokudera es una persona tosca, ruidosa y violenta que —mientras pueda— expresará a los cuatro vientos su aversión hacia las cosas o las personas. En este caso, Takeshi Yamamoto es su objetivo, y es que el chico es una persona carismática, fresca y natural, características que solo consiguen que a Hayato le crispen los nervios y le dedique siempre miradas de odio. Sin embargo, eso no impide que siempre aparezcan juntos o rondando uno cerca del otro.

Más allá de eso, Yamamoto es de las pocas personas que tiene la paciencia de manejar el volátil temperamento de Gokudera; además de preocuparse por él en secreto, durante reiteradas ocasiones ha expresado su deseo de querer una amistad con el tsundere de pelo plateado, así como las ganas que tiene de pasar un rato juntos. Durante los combates efectuados es normal verlos hacer equipo y observar cómo ambos se cuidan las espaldas. Esa constante interacción entre ellos, ha dado pie para que los amantes del Yaoi dejen volar sus más picantes y alocadas ideas sobre una relación amorosa entre ellos, y es que... ¿acaso no es demasiado evidente que ellos son una pareja canon?