Durante la primaria, Sakutarou Matsumoto es el encargado del curso junto a Aki Hirose. Ella es una chica muy popular y amistosa, y enseguida insiste en que Sakutarou la llame por su primer nombre, para poder trabar amistad y conocerse mejor. Al principio, al muchacho le resulta extraña la actitud de su compañera de clase, pero pronto comienza a desarrollar sentimientos hacia ella que procura mantener ocultos para así poder seguir siendo amigos. A medida que pasan los años, el vínculo entre ellos crece y comienzan a salir. Cuando a Aki le diagnostican leucemia, el mundo de Saku da un vuelco. El tiempo corre y, si bien Aki insiste en que va a ponerse mejor, Saku sabe que debe cumplir su promesa de llevarla de viaje antes de que sea demasiado tarde.

La historia entre estos dos enamorados es dulce y trágica a la vez. Nos da la oportunidad de ver cómo la relación entre ambos se desarrolla desde que eran pequeños hasta la adolescencia, y por todas las cosas que pasan juntos. Es triste ver cómo la vida de Saku se derrumba luego del diagnóstico de Aki y cómo él se esfuerza por hacer de cuenta que todo sigue igual que antes, aunque no sea cierto. Si no quieren que nadie los interrumpa cuando lloran, busquen un lugar aislado para leer.

Keito Aoyama fue una vez una estrella infantil que decidió dejarlo debido a un evento que la traumatizó; se recluye la mayor parte del tiempo en su habitación, saliendo solo ocasionalmente. Es durante una de estas salidas que conoce al director de una escuela, quien la invita a formar parte de la misma, asegurándole que en ese lugar su pasado no será importante, y con la promesa de conocer nuevos amigos.

Una adolescente que se niega a abrir su corazón luego de haber sido traicionada por quien creía era su amiga, encuentra consuelo y amistad en un grupo de personas excéntricas que, aunque no parezca, tiene muchas cosas en común con ella. Los eventos que tienen lugar a medida que la historia avanza de seguro harán que se les salten un par de lágrimas, a la vez que los podrán un poco nerviosos. El camino hacia la felicidad no es uno que esté pavimentado por completo, para desgracia de Keito…

Tras la insistencia de su hija, Papá accede a adoptar al cachorro que encontraron abandonado en una caja de cartón. Así comienza la nueva vida de Happy, como lo bautizan en la casa, el protagonista de esta historia. A medida que los años avanzan, las cosas en el hogar empiezan a cambiar: la hija, que antes jugaba con él y le daba premios deliciosos, ya no le presta atención; Mamá, que parecía afectuosa, es cada vez más distante. Pero el cambio mayor son las caminatas con Papá, que antes eran cortas pero cada vez toman más tiempo. Luego de divorciarse de su mujer, Papá carga sus pertenencias en el coche, carga a Happy e inicia un viaje sin rumbo alguno. ¿Qué les espera al final del camino?

Hoshi Mamoru Inu inicia el relato por el final, cuando un grupo de personas encuentra el auto y, dentro de éste, el cadáver de un hombre y, a sus pies, el de un perro. Desde el principio, esta historia es un golpe directo al pecho, haciendo que el lector se pregunte qué pasó durante los últimos momentos del hombre y del perro. La particularidad de este manga es que el relato es desde el punto de vista de Happy, haciendo que todo resulte más triste, con los eventos de la vida del perro teñidos de su perspectiva canina.

Kaoru Amane tiene 16 años y debe estar encerrada en su casa durante la mañana debido a una rara enfermedad que no le permite estar en el exterior durante el día, ya que estar bajo el sol aunque sea una mínima fracción de tiempo terminaría con su vida. Desde su ventana, observa siempre al mismo joven, sonriendo junto a sus amigos y pasándola bien, deseando poder conocerlo algún día. Si bien Kaoru pasa las mañanas encerrada, una vez que el sol desaparece, sale al exterior a cantar en el centro de la ciudad, y durante una de estas salidas nocturnas se cruza con el joven, Kouji Fujishiro, y le confiesa que está enamorada de él.

Así comienza una extraña relación entre ambos, que hace que Kaoru desee poder estar en el exterior y la impulsa a recurrir a cualquier medida al alcance de su mano para poder lograrlo. Rompe el corazón saber que una relación entre estos dos jóvenes es casi imposible, ya que ambos viven en mundos opuestos: mientras que Kouji disfruta sus días bajo el rayo del sol, Kaoru solo es capaz de vivir bajo la pálida luz de la luna. Aun así, ambos logran conocerse y enamorarse, a sabiendas de que, posiblemente, todo termine mal. Los esfuerzos de Kaoru por formar parte de la vida diurna son admirables, con Kouji siempre a su lado. Pero Kaoru no puede ser más fuerte que la extraña enfermedad y todo termina en tragedia, dejando tanto a Kouji como a nosotros, los lectores, con una sensación de pérdida muy grande.

Ayu es una adolescente de 17 años que gana dinero vendiendo su cuerpo. Ha visto lo peor de la sociedad y está convencida que el amor real, puro y desinteresado, no existe. Todo eso cambia cuando conoce a una dulce ancianita, que le enseña que puede volver a confiar en la gente. Junto con esta señora, Ayu cría a Pao, un cachorro que encuentra en la calle. Cada día que pasa, la joven es testigo de que todas las plantas pueden florecer si se les brinda la atención y cariño necesarios. Aun así, el futuro de Ayu es incierto…

Este manga hace un excelente trabajo en demostrar a la sociedad moderna, fría y ajena a los problemas de muchos adolescentes como Ayu. Ella es una joven que no tiene familia y quien no cree que su vida tenga un propósito. La anciana le ayuda a ver que eso no es cierto, le enseña a quererse y le da un significado a su vida. Tras la muerte de la señora, Ayu decide cumplir el deseo de esta de pagarle la operación de corazón a un muchacho a quien consideraba un hijo. Lo más trágico de esta historia es que, cuando por fin la adolescente encuentra algo por lo que luchar, aparecen varias trabas en su camino que la llevan a volver a vender su cuerpo y terminan por enfermarla. La cruda realidad del manga seguro los dejará pasmados y llorando a moco tendido.

A Shizuru Satonaka siempre le han dicho que enamorarse lleva a la muerte. Con esta frase en mente, vive el día a día, evitando a toda costa desarrollar sentimientos por alguien; eso hasta que, durante la ceremonia de inicio de clases de la universidad, conoce a Makoto Segawa. A los ojos del joven, Shizuru es una estudiante universitaria con el aspecto de una niña: pequeña, de grandes ojos… y sin senos. Entre ambos nace una amistad, pero mientras Makoto está enamorado de su compañera de clases, Miyuki Toyama, Shizuru comienza a percatarse que lo que siente por Makoto es más que solo cariño hacia un amigo. La joven debe alejarse de él, y cuando Makoto decide por fin ir a buscarla, lo que descubre lo deja de una pieza.

Tada, Kimi wo Aishiteru relata la colorida historia de Shizuru, una estudiante universitaria de aspecto infantil que, ignorando las enseñanzas de su madre, se enamora de un compañero de clases. Lo que Makoto no sabe es que la joven padece una extraña enfermedad que la lleva a alejarse de él. Lo que genera más tristeza es que, cuando Makoto por fin decide ir en busca de la chica, se encuentra con que ya es demasiado tarde. A la vez, la situación deja un gusto amargo, ya que Shizuru cumple sus sueños y logra dejarle a su primer y único amor un hermoso mensaje, pero deja a Makoto incapaz de confesar sus sentimientos de una vez por todas.

Cuando era joven, Juri Mutou era una virtuosa pianista, pero tras un evento traumático decide no volver a tocar el instrumento nunca más. Luego de tres intentos de suicidio, su tía la invita a visitar a los presos que se encuentran aguardando su muerte en la cárcel; es allí donde conoce a Yuu, quien está allí por asesinar a tres personas, y también ha intentado suicidarse en varias ocasiones. Todos los jueves, Juri visita a Yuu y conversa con él, sobre sus traumas del pasado, el odio y resentimiento que guarda hacia su madre y por qué ha intentado quitarse la vida. Yuu le cuenta la verdad de lo que ocurrió aquel día de los homicidios, y le pide que toque el piano para él, ya que la admiraba cuando era un adolescente. El día más temido para ambos llega, la joven toca el piano para Yuu una última vez, despidiéndolo con lágrimas en los ojos.

¿Perdonarías a quien te hirió en el pasado? Esta es una de las preguntas que se plantea en esta historia, por un lado con Juri, guardándole rencor a su madre por no haberla defendido en el pasado, y con Yuu, a quien tildan como un criminal sin corazón. Al estar el hombre aguardando a ser ejecutado, sabemos que no habrá ningún final feliz, pero aún así no podemos evitar querer que Juri y Yuu terminen juntos. Ambos aprenden mucho uno del otro durante esos momentos felices que comparten los jueves en la prisión, dejándonos con un el corazón destruido ante el final y preguntándonos por qué no podría haber terminado de otra manera. Lágrimas aseguradas.

Hotaru es una niña de seis años que se adentra en el bosque un verano que va al campo a casa de su tío, intrigada por las historias de espíritus que aparentemente habitaban allí. Cuando, acongojada, descubre que está perdida, comienza a llorar; es entonces cuando aparece Gin, un muchacho que le ofrece ayuda para poder salir del bosque. La niña agradecida pretende darle un abrazo, pero el joven la sorprende dándole un golpe con una vara y diciendo que si lo tocan, desaparecerá para siempre. A lo largo de los años, Hotaru acude al bosque todos los veranos, donde se reencuentra con Gin y lo mantiene al día de su vida en la ciudad. Pero todo cambia cuando Gin invita a Hotaru al festival en la montaña…

Hotarubi no Mori e es una historia dulce y tierna sobre dos almas que no pueden estar juntas. Durante el relato, Hotaru debe luchar contra el impulso de tocar a Gin, ya que si lo hace, él desaparecerá. Ambos forman un vínculo profundo a lo largo de los años, con la niña notando que ella cada vez está más grande mientras que Gin se mantiene igual. Lo más frustrante es el final, donde un desafortunado evento pone fin a la relación de los dos. Las últimas palabras de Gin calan profundo cuando, con una sonrisa, le dice a Hotaru algo que da un final hermoso y triste para estas dos almas que vivían en mundos paralelos.

Para el pequeño Punpun Onodera, de 11 años, las cosas son simples. No es sino hasta que conoce a su nueva compañera de clases, Aiko Tanaka, que experimenta de primera mano lo que es enamorarse. Pero este nuevo sentimiento le trae muchos problemas, ya que no sabe cómo lidiar con la situación, llevándolo a sentirse en extremo deprimido. A medida que los años avanzan, Punpun descubre que no todo en la vida es lo que parece, y que puede llegar a ser muy difícil encontrar el rumbo.

El camino de Punpun está plagado de obstáculos e incógnitas que aquejan al niño en su viaje a la madurez. Lo que al principio vemos desde la perspectiva de un pequeño comienza luego a tomar forma, y descubrimos lo que realmente está pasando alrededor suyo. Es triste ver cómo el mundo de Punpun cambia constantemente, deformando y alterando su espacio seguro, llevándolo a atravesar momentos difíciles. Lo acompañamos mientras descubre que las personas que alguna vez admiró no son lo que él creía que eran, y que a veces los finales felices no se consiguen tan fácilmente. La aclamada obra de Inio Asano de seguro hace que sientan tristeza y derramen alguna lágrima por el pobre Punpun que, a su vez, nos representa a todos nosotros.

Tras el nacimiento de su hermanito, Hitomi siente que sus padres ya no le prestan atención. Esto hace que la niña se sienta sola, hasta que un día en la escuela, asiste a una charla informativa sobre los perros guía, y descubre que ella puede formar parte del programa de entrenadores para cachorros. Así llega Eye a su vida, un cachorro de labrador que Hitomi debe entrenar para que se convierta en guía para ciegos. La niña trabaja con el perro hasta que llega el momento en que Eye debe marcharse para cumplir con su trabajo, lo que deja a Hitomi muy triste. Al verla tan descorazonada, una mujer de la fundación le comenta que, una vez que el perro cumpla con su deber, puede volver al hogar donde fue entrenado. Hitomi se alegra y comienza a contar los días para que su amado compañero regrese a su lado.

Si tienes mascotas, esta historia te llegará al corazón. Eien no With relata el comienzo de la relación entre Eye y Hitomi, cómo ambos desarrollan un lazo profundo que se ve interrumpido cuando el perro debe ir a su nuevo hogar. El verdadero drama comienza cuando Eye regresa al hogar donde fue criado, pero se pasa los días frente a la puerta esperando el regreso de quien fue su amo durante tantos años de servicio… cosa que enfurece a Hitomi, que tanto estuvo esperando la vuelta del perro. Tras conocer al dueño anterior de Eye, la joven entabla una relación de amistad con él, y juntos pasan los días junto al perro… hasta que descubren que Eye está enfermo. Seguro después de leer ésta historia sentirán el impulso de correr hacia sus mascotas y hacerles saber cuánto los aman.