Bete es un aventurero que se caracteriza por su fuerza… y su actitud engreída. Este lobo no soporta a los débiles que no pueden hacer nada por cuenta propia, ¡y no teme en decirlo en voz alta! Si hay alguien que sabe de la poca tolerancia del joven hacia los cobardes es Bell Crannel, el protagonista de DanMachi. Han sido varias las oportunidades en las que Bete lo ha ridiculizado y burlado de su escasa capacidad para resolver problemas y situaciones de peligro por cuenta propia.

Aun así, y pese a ser un poco egocéntrico, Bete es también un tsundere que oculta sus verdaderos sentimientos y que se preocupa por sus subordinados, asegurándose que estén a salvo durante las expediciones que realizan a las mazmorras. Este bishie de rasgos lobunos ostenta ojos color ámbar y cabello gris claro. Su larga cola y orejas en punta son del mismo color que su pelo, teniendo estas últimas el interior blanco como la nieve.

En Fukigen na Mononokean abundan los youkai, pero Yahiko se las arregla para hacerse notar entre la multitud. Él es un zorrito que puede tomar tanto su forma animal como adoptar una forma humana. Cuando decide presentarse como humano, adquiere la apariencia de un niño vistiendo un kimono blanco y sandalias, y lleva el cabello color arena corto y un par de orejas que coronan su cabeza. Generalmente, se encuentra con los ojos cerrados, pero esto cambia cuando se enoja: en ese caso, Yahiko abre los ojos, que se vuelven negros y rojos.

En su forma animal, él es un zorro con orejas negras y pelaje color crema, y su cuello está rodeado por un collar de fuego amarillo. Yahiko es un youkai problemático e infantil, ya que si no se sale con la suya, se enoja. Para obtener lo que quiere, acostumbra a hacer berrinches, obligando a los demás a cumplir con sus exigencias. Además, y haciendo honor a su especie, es muy travieso, jugándole bromas pesadas a la gente, tal y como haría cualquier cachorro.

A veces, cuando se ha vivido tanto tiempo, como es el caso de los espíritus, se tiende a olvidar ciertas cosas, ya sean importantes o no. En el caso de Kuugen Tenko, la deidad a cargo de proteger a los hermanos Noboru y Toru Takagami, lo que se ha olvidado no es un detalle menor… ¡No recuerda su género! Es por eso que a veces se muestra en su forma femenina y, otras tantas, en su forma masculina. Kuugen tiene el cabello largo y rubio, con orejas del mismo color, a excepción de la punta de las mismas, que es de color negro. También puede tomar una forma animal, un gran kitsune de pelaje sedoso y larga cola.

Debido a su carácter juguetón y bromista, Kuugen fue sellado, ya que le gustaba gastar pesadas bromas a la gente. Pero cuando un youkai amenaza a uno de los miembros de la familia Takagami, deciden liberarlo para pedirle ayuda. A partir de ese momento, los hermanos Takagami y Kuugen forman un vínculo que de a poco se va transformando en amistad. ¡Ha de ser divertido tener un amigo como este simpático zorro!

Yuuichi Komura es un guardián zorro que está encargado de proteger a la princesa con la ayuda de otros cinco guardianes. Se muestra como un chico tranquilo y no muestra emoción alguna; a menudo está durmiendo, haciendo gala de una impresionante habilidad para quedarse dormido en cualquier lado. A pesar de ocultar sus emociones, es el más amable de los cinco guardianes, preocupándose a su manera de que la princesa esté siempre a salvo.

Al ser descendiente del zorro de nueve colas, posee la habilidad de utilizar el fuego espiritual y emplear las tretas e ilusiones por las que son reconocidos los kitsunes. Su pelo es corto y blanco, al igual que sus orejas, que aparecen coronando su cabeza cuando deja ver sus rasgos animales. Otra cosa que lo caracteriza es su aprecio hacia los animales, lo que le da un aire más tierno y derrite el corazón de las fans.

Todo en la apariencia de este zorrito es llamativo. Por empezar, su cabello rubio está adornado con algunas mechas coloridas, al igual que su cola, lo que hace juego con su alegre personalidad. En el escenario, Shu☆Zo aparece como un zorro de pelaje marrón, a excepción de la cabellera que conserva de su forma humana. No solo es bien parecido sino que también es un gran cantante y, junto a su banda, son el grupo más popular de la ciudad, aclamados y adorados por los fans, especialmente las chicas.

Shu☆Zo es más que una cara bonita y una voz afinada. Como líder de su banda, se toma con mucha seriedad la tarea de guiar a los otros dos miembros, aconsejando y velando por el bienestar de ambos. En ocasiones puede resultar engreído, como si la fama se le hubiese subido a la cabeza, pero demuestra ser bastante centrado a la hora de resolver problemas y si algo es seguro es que no se toma a sus compañeros de banda y amigos a la ligera.

Claro que Tomoe estaría incluido en nuestro conteo, después de todo, se trata de un kitsune con muchos puntos destacables. Por empezar, lleva el cabello plateado corto, con unas orejas y cola a juego, y viste un kimono tradicional mientras está en el templo, pero lo cambia por un uniforme cuando acompaña a Nanami al instituto. Al principio, no le agrada mucho la idea de que la joven sea la nueva diosa del templo, pero con el tiempo le toma aprecio y la ayuda con sus tareas, además de protegerla de los peligros a los que se ve enfrentada en oportunidades.

Durante su juventud, Tomoe es un youkai despiadado que no se preocupa por la vida de nadie, salvo por la suya propia, pero con el correr de los años, y tras cruzarse con diferentes personas en su camino que le ayudan a ver el mundo con otros ojos, se vuelve un ser más compasivo, aunque lo oculta bajo una personalidad tsundere. Resulta un zorro muy estricto y severo, cuyo corazón se ablanda cuando se trata de Nanami. Ese es el poder del amor…

Ahora vamos a hablar del secuaz de Momiji en Binbougami ga! Momou puede alternar entre dos formas, siendo una de ellas la de un chico de cabello marrón y ojos de diferente color: el izquierdo de color verde y el derecho en azul. Su otra forma es la de un perrito pequeño, similar a un chihuahua y, al igual que en su forma humana, lleva un pañuelo rojo alrededor del cuello. A diferencia de otros personajes con forma animal, Momou no cambia a su antojo, sino que sucede en situaciones específicas. Esto es lo que hace que este chico se destaque, pues él se transformará cuando sienta placer… ¡al ser azotado, golpeado o maltratado! Así es, Momou es un masoquista en extremo, que disfruta de recibir golpizas.

Además de esta particularidad, y como todo perro, posee un agudo sentido del olfato y oído, habilidades de las que Momiji saca provecho para llevar a cabo su trabajo de recolectar la buena suerte de Ichiko. A diferencia de su forma humana, cuando hace gala de unas orejas pequeñas y caídas, cuando se presenta como un perro sus orejas son color crema y erguidas como las de un chihuahua.

Kokkuri-san es un youkai de largo pelo plateado y orejas a juego. En su forma animal se muestra como un zorrito de pelaje amarillo y esponjosa cola, aunque él mismo ha admitido haber teñido su pelaje de ese color para resultar más llamativo y lindo. ¡De esa manera puede llamar la atención de Kohina! Ella es la niña que ha invocado a Kokkuri-san y de quien él decide hacerse cargo, cuidándola como si se tratara de su hija.

Este kitsune ha demostrado ser muy bueno para las tareas del hogar, encargándose de la limpieza de la casa y de las comidas de la niña, labor que no se toma a la ligera: su misión es brindarle una dieta balanceada y alejarla de su obsesión con el ramen instantáneo. Otro motivo que destaca a Kokkuri-san es la manera en la que cuida a Kohina, llegando a ser muy sobreprotector. Además, cómo intenta convertirla en una “niña de verdad”, enseñándole a sonreír y a comportarse menos como la muñeca que Kohina dice ser. ¡Kokkuri-san es un “padre” muy atento!

Parte del servicio de guardaespaldas para los youkai de mayor rango, Soushi Miketsukami es un zorro de nueve colas con el deber de proteger a Ririchiyo Shirakiin. Todo en él se destaca, desde su pulcra apariencia hasta su amable —aunque a veces pervertido— carácter, y cómo es fiel a su ama, arriesgando su vida para salvar la de ella. Soushi muestra un exterior calmado y tranquilo, pero cambia drásticamente cuando el bienestar de su adorada ama se ve amenazado. En esas situaciones, toma su forma youkai, listo para defender a Ririchiyo cueste lo que cueste.

No son únicamente sus nueve colas blancas y orejas de zorro lo que llaman la atención cuando se trata de Soushi, sino también sus preciosos ojos, que son de dos colores distintos: el ojo derecho es azul mientras que el derecho es dorado oscuro. Cabe señalar también su relación con los otros habitantes de la mansión, especialmente con Zange Natsume, Banri Watanuki y Kagerou Shoukiin, amigos de la infancia junto a los que creció. Cuando están los cuatro en la misma habitación, se desenvuelven hilarantes situaciones, que dejan claro el vínculo que comparten.

Si hablamos de chicos inumimi, Inuyasha debe estar en el primer puesto. Él es hijo de una mujer humana y un demonio perro, lo que lo convierte en un híbrido. Gracias a su condición, es despreciado tanto por los humanos, por su apariencia youkai, como por los demás demonios, ya que porta sangre humana. Debido al desprecio sufrido por ambas especies, Inuyasha se vuelve un ser violento —que se enoja con facilidad— y dado a tomar decisiones impulsivas. Al conocer a Kagome, la personalidad del joven comienza a ablandarse un poco, y pasa a preocuparse por otras personas, desarrollando un vínculo con la estudiante de quien luego se enamora.

Inuyasha tiene tres apariencias diferentes que varían según las circunstancias. Generalmente es un chico de cabello blanco plateado y orejas de perro del mismo color, pero esto cambia las noches de luna nueva, cuando se convierte en un humano de largo cabello negro y pierde todos sus poderes. Por otro lado, cuando se le arrebata su espada, el joven se siente vulnerable, lo que impulsa a su lado demoníaco a tomar control sobre él, cegándolo por completo. Otra cosa destacable de Inuyasha es cómo, poco a poco, se convierte en un chico más dócil y civilizado, dejando atrás, aunque por momentos, su carácter impulsivo.